El hidrosulfito sódico es una sal blanca cristalina que se descompone en presencia de oxígeno y humedad. Debido a su potente capacidad reductora, se oxida fácilmente, lo que lo hace eficaz en diversas aplicaciones reductoras.
El hidrosulfito sódico es una sal blanca cristalina que se descompone en presencia de oxígeno y humedad. Debido a su potente capacidad reductora, se oxida fácilmente, lo que lo hace eficaz en diversas aplicaciones reductoras.